Arán Ediciones, en su compromiso con la Formación Profesional, visitó en Madrid la competición Spainskills 2022, donde han participado estudiantes de todo el país. Los ganadores representarán a España en las rondas europeas (Euroskills) e internacional (Worldskills) poniendo a prueba sus habilidades profesionales aprendidas en distintos ciclos formativos.

Spainskills

En el encuentro, celebrado en IFEMA y donde también estuvo presente la ministra de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría, compitieron casi medio millar de estudiantes recién titulados procedentes de todas las comunidades y ciudades autónomas.

Durante tres días los alumnos midieron su valía profesional y destrezas en diferentes disciplinas centradas en ámbitos relacionados con el transporte y la logística, construcciones e instalaciones, fabricación, informática y comunicaciones, artes creativas y servicios.

Además de las modalidades de competición oficial, esta edición contó con seis de exhibición: robótica colaborativa, robótica móvil, sistemas robóticos integrados, tecnología de laboratorio químico, escaparatismo y comercialización e industria 4.0. Spainskills se ha convertido, según se afirma desde el Ministerio de Educación y Formación Profesional, en la cita por excelencia de la FP y constituye un escaparate de la calidad de estas enseñanzas en España.

Del mismo modo, es un medio para estimular a estudiantes, profesorado y empresas. También se constituye como un foro de debate sobre la evolución de los estándares profesionales, la calidad y la innovación en los diferentes sectores productivos.

Arán Ediciones, referente en FP

Por su parte, estudiantes y profesores de distintos centros presentes en Spainskills se interesaron por la oferta editorial de Arán correspondiente a 25 ciclos formativos. La Formación Profesional es una de las opciones académicas por las que más se está apostando en los últimos años. El impulso de la FP se ha potenciado con la aprobación a finales de diciembre de una nueva ley para su regulación. La norma abrió la puerta a la combinación de la enseñanza teórica en las aulas con las prácticas en empresas, es decir, lo que se conoce como FP dual.